4 pasos para hablar de cuestiones incómodas sin llegar a enojarse. Verás qué cambios tan positivos obtienes en el amigo
VIDA COTIDIANA por: (Zuzanna Górska-Kanabus – Aleteia). Ellen se sentó en un banco y esperó a que llegara su amiga. Pasaron 25 minutos, y ella empezó a sentir que la rabia y la frustración aumentaban a cada minuto. Esta no es la primera vez que Verónica llega tarde. Y siempre ha sido así: ella suele llegar de 20 a 30 minutos atrasada, pero en lugar de disculparse, simplemente sonríe y dice que estuvo ocupada.
Ellen comenzó a sentir resentimiento con la actitud de Verónica. Esos 20 minutos a ella le importaban, pero no sabía qué decir. De ninguna forma ella le diría a Verónica que su comportamiento la estaba incomodando. Generalmente, se queda callada y oculta su rabia.
Estoy segura de que la historia de Ellen resulta familiar. A veces, nuestros seres queridos, compañeros de trabajo o jefes se comportan de una forma que nos hace sentir heridos o enojados, pero no sabemos cómo decírselo. Esas conversaciones son difíciles porque pueden desencadenar fuertes emociones y llevar a una o a ambas personas a decir cosas de las que se pueden arrepentir más tarde.
Existe una manera de lidiar con estas difíciles conversaciones sin caer en los tipos de generalizaciones o acusaciones que perjudican las relaciones. La próxima vez que tengas que lidiar con problemas incómodos con las personas, intenta seguir este patrón de cuatro pasos: 1 ) hechos, 2) sentimientos, 3) expectativas y 4) consecuencias.
Céntrate en los hechos
Cuando quieras decirle a alguien que su comportamiento es perjudicial, céntrate en los hechos. Sé específico y evita las generalizaciones (es decir, el siempre o nunca).
En lugar de decir “Siempre llegas retrasado”, o “Nunca llegas a tiempo”, opta por decir “En el último mes, has llegado cinco veces con retraso”, o “Has llegado retrasado a cuatro de las cinco reuniones que hemos tenido”.
Centrarse en los hechos nos ayuda a mantener las especificidades y evitar juicios injustos.
Dile cómo te hace sentir su comportamiento
Necesitas decirle a la persona cómo te sientes con sus acciones. Puedes decir que ese comportamiento te hace sentir herido o que te sientes ofendido o con rabia. Es importante que formules la frase usando “yo”, y no “tú”.
Por ejemplo, “me enojo cuando llegas tarde a nuestras reuniones”, o “me incomoda cuando no respetas mi tiempo”.
Expresa tus expectativas
El siguiente paso es decirle a las personas tus expectativas –específicamente qué cambios esperas. En caso de un retraso constante, podrías decir “llega a tiempo la próxima vez”, o “por favor, avísame si te vas a retrasar”. Sé realista y pide cosas que la otra persona pueda hacer.
Decir cosas como “yo no quiero que te atrases nuevamente”, o “la próxima vez tú me esperarás a mí” no es la mejor forma. Nadie puede prometerte que nunca se retrasará; eso no es realista. Y la segunda frase parece que estás intentando vengarte.
Explica las consecuencias
Finalmente, comunica las consecuencias, qué es lo que sucederá si la otra persona no cambia su comportamiento. Las consecuencias no son una amenaza. Sólo información. Por ejemplo: si la otra persona se retrasa, tú esperarás sólo cinco minutos y luego te irás.
Resumiendo
Entonces, en lugar de soportar silenciosamente el retraso crónico de Verónica y luego explorar, Ellen podría decir algo así:
(Hechos) “Verónica, esta es la quinta vez que nos vemos este año, y es la cuarta vez que llegas con más de 25 minutos de retraso”.
(Sentimientos) “Me irrita cuando llegas tarde y actúas como si no fuera un gran qué. Me siento poco respetada”.
(Expectativas) “Por favor, planea tu día para que puedas llegar a tiempo a la próxima reunión”.
(Consecuencias) “La próxima vez voy a esperar cinco minutos y luego me iré”.