Sus breves seis años de fama sobre los escenarios junto a The Doors, aquella banda ineludible del rock psicodélico, pasó a la historia como uno de los íconos definitivos de la contracultura estadounidense de los 60.
Sus breves seis años de fama sobre los escenarios junto a The Doors, aquella banda ineludible del rock psicodélico, pasó a la historia como uno de los íconos definitivos de la contracultura estadounidense de los 60.