RELIGIOSO – CIUDAD DEL VATICANO (AICA). ¨Si por maniobras económicas o para hacer negocios no claros se cierra una fábrica o una sociedad empresarial y se quita el trabajo a los hombres, esta persona comete un pecado gravísimo¨, sostuvo el papa Francisco en su saludo en lengua italiana durante la audiencia general de este miércoles en la Plaza de San Pedro.
El papa Francisco aseguró este miércoles que se comete un pecado gravísimo cuando se «quita el trabajo» a las personas para realizar «maniobras económicas o negocios poco claros».
Lo hizo durante su mensaje en lengua italiana a los peregrinos que participaron de la audiencia general en la Plaza de San Pedro, en el Vaticano, entre ellos un centenar de trabajadores de la empresa de televisión Sky Italia que se encuentran en situación de conflicto.
«El trabajo nos da dignidad. Los responsables, los dirigentes tienen la obligación de que cada hombre y mujer pueda trabajar, pueda ir con la cabeza alta y pueda mirar a los ojos de los demás con dignidad», sostuvo en unas palabras improvisadas.