«Bife a la plancha con pure: pequeños trucos para chuparte los dedos»

COCINA. El bife a la plancha con puré, es quizás uno de los platos más representativos de la Argentina. Su sabor exquisito, su preparación casi instantánea y la posibilidad de comerlo en toda época del año, han llevado a este plato a un nivel de altísima popularidad. En el país se conocen cinco cortes de bifes, los cuales responden a cortes específicos: Bife de lomo, bife de chorizo, bife de costilla, churrasco o churrasquito y ojo de bife. A continuación de contamos secretos y trucos para que el bife adquiera mayor sabor, salga bien jugoso y tierno.

Se deben calcular entre uno y dos bifes por persona adulta (según el tamaño)

Modo de preparación:

* Calentar muy bien la plancha, preferentemente acanalada.
* Untar la plancha ya caliente con un pequeño trozo de grasa del mismo bife
* Cocinar de a uno o dos bifes por vez para que la plancha no se enfríe.
* Colocar el bife sobre la plancha, a los pocos minutos se lo puede levantar y colocar sobre el mismo lado pero en otro sentido para que el dibujo de la plancha sobre la superficie quede en forma de rombos y no se queme la carne exterior.
* Cuando en la superficie superior se vean unas gotitas de sangre es momento de darlo vuelta.
* Salarlo sobre la superficie ya cocida y terminar de asar la otra cara del bife como se hizo con la primera, si se salara previamente, antes de sellarlo, saldrían los jugos de la carne y esta saldría seca y dura.
* Terminar de cocinar la otra cara del bife como se hizo con la primera.

El bife a la plancha debe quedar dorado por fuera y rosado o rojo por dentro, dependiendo del gusto de cada uno.

Este plato se acompaña de puré de papas o mixto (papa y calabaza)

TRUCOS PARA PREPARAR UN BIFE SABROSO, JUGOSO Y TIERNO

¡La plancha bien caliente!

Poner la plancha a fuego fuerte unos minutos antes de colocar el bife: la plancha tiene que estar bien caliente. Esto es fundamental. Cuando la plancha esté lista, bajar a fuego medio y untarla con un poco de grasa cortada del mismo bife. Si no, rociar la carne con unas poquitas gotas de aceite para evitar que se pegue demasiado.

¡Vuelta y vuelta!

Colocar el bife en la plancha y dejar unos minutos que cocine de un lado. Si la plancha es acanalada, se puede ir moviendo el bife para que no se marque mucho en la carne la forma de las canaletas de la plancha. Cuando en la parte de arriba del bife emerjan unas gotas de sangre, ya está listo para darlo vuelta.

¡Salado!

Una vez que se dio vuelta, salarlo por el lado cocido. Si se sala antes, la carne saldrá seca y dura. Dejar que se termine de cocer la otra parte como se hizo con la primera; volver a darlo vuelta y salar del lado que se acaba de cocinar el bife.

¡Dejarlo reposar solo un instante una vez cocinado!

Retirarlo de la plancha y dejarlo reposar no más que un par de minutos antes de servir. Si el bife se corta antes, se corre el riesgo de que se pierdan sus sabrosos jugos.

Fuente: carneargentina.org.ar