- Los productos antibacteriales alcanzados por esta normativa incluyen jabones líquidos, jabones en barra, espumas, geles y todo producto que se aplique tanto en manos como en cuerpo. Incluye los productos de origen nacional o importado.
SALUD. El Ministerio de Salud de la Nación informa que mediante la Disposición N° 13832/2016, publicada hoy en el Boletín Oficial, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) prohíbe el uso de ciertas sustancias en la composición de productos antibacteriales (de origen nacional o importado) inscriptos ante esta Administración Nacional como «Productos de Higiene Personal, Cosméticos y Perfumes».
Los productos antibacteriales alcanzados por esta normativa incluyen jabones líquidos, jabones en barra, espumas, geles y todo producto que se aplique tanto en manos como en cuerpo, diseñado para usarse con agua y enjuague posterior.
La lista de sustancias prohibidas, que figura como Anexo I de la disposición mencionada, incluye Cloflucarban; Fluorosalan; Hexilresorcinol; Amiltricresoles secundarios; Cloruro de metilbencetonio; Oxicloroseno de sodio; 3,4,4′-triclorocarbanllida y Tricloro-2,4,4′ hidroxi-2′ difenileter.
Al mismo tiempo, la norma establece que la sustancia triclosán sólo podrá utilizarse en Productos de Higiene Personal, Cosméticos y Perfumes bajo las condiciones y restricciones de uso que se detallan en el Anexo II.
La Disposición 13832/16 entrará en vigencia a partir del 27 de diciembre de 2016 y fija un plazo de 24 meses para que las empresas titulares, fabricantes e importadoras de los productos alcanzados procedan con las adecuaciones necesarias. Para ello, deberán iniciar ante la ANMAT un trámite de modificación de fórmula cosmética y rótulo de conformidad con la Resolución del ex MS y AS N° 155/98 y disposiciones complementarias.
La necesidad de regular los productos para el lavado de manos y la higiene corporal que contienen antisépticos y desinfectantes, ya había sido mencionada por la ANMAT en un artículo publicado durante el mes de octubre. Allí se explica que el uso prolongado de estos productos puede generar resistencia bacteriana y alteraciones hormonales.