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SOCIEDAD. Mujeres que forjaron su historia a través del ejemplo, la unión, responsabilidad y el compromiso, mujeres que fueron pilares para sus familias y de alguna manera aportaron a la historia de esta gran ciudad, mujeres que hoy los arroyitenses a través de las autoridades y el pueblo en pleno.
El desarrollo del acto se realizó el pasado viernes 8 del corriente en el Hall Central de la Municipalidad, con la presencia de autoridades gubernamentales, encabezadas por el intendente Mauricio Cravero, la Vice Intendente Graciela Tristany, Concejales los distintos bloques, Secretarios del Ejecutivo, integrantes del Tribunal de Cuentas, Directores, Coordinadores de las áreas municipales, el Ciudaddano Ilustre Coco Schiavoni, representantes de instituciones intermedias, familiares de las homenajeadas y vecinos.
Cabe recordar que el pasado 10 de marzo el intendente municipal elevó al cuerpo Legislativo de nuestra ciudad, un proyecto de Declaración de las Primeras Ciudadanas Ilustres en la historia de Arroyito.
Era realmente meritorio reconocer la trayectoria de las señoras Nilda Fonti de Marttinato, Lilia Díaz de Chioccarello, Nilde Raquel Alonso, a esta iniciativa del ejecutivo se le sumó la grata postulación por parte del bloque de la UCR presentado por los Concejales Benedetti y Beigveder de sumar a otra querida arroyitense, la señora Ana María Medina.
Nilda Fonti de Martinatto, hija de Juan Fonti y Lidia Senn, siendo huérfana de madre desde muy pequeña, tomó como bandera el fortalecimiento y la unión familiar. Siendo muy joven se casa con Ángel Martinatto, tuvieron cuatro hijos (Mirta, María Elena, Rosita y Gabriel) y junto a familiares desarrollaron un emprendimiento comercial en nuestro medio. Que ante la muerte de su esposo, tuvo que enfrentar como mujer, un rubro desafiante para la época, con una familia que aun necesitaba crecer.
Su fortaleza, honestidad, trabajo incansable, con el apoyo de familiares y amigos, le permitieron no sólo vencer los obstáculos, sino transmitir a sus hijos el deber que tenían para con la sociedad de Arroyito que tanto los había apoyado.
Colaboradora permanente de la Iglesia Católica, el Club de Abuelos, el Hospital Carlos Rodríguez, Acercar, e incansable participante de eventos que contribuyen a acrecentar la cultura y bienestar de su Arroyito soñado.
Lilia María Díaz de Chioccarello llega a nuestra ciudad en febrero del año 1973, a acompañar a su esposo, quien ya se encontraba en Arroyito desde el mes de diciembre del año anterior.
No pasó mucho tiempo, de su arribo a nuestra ciudad, que la familia Chioccarello se integrara a la vida social activa de nuestra comunidad. Lilia, a partir del mes de mayo de ese año, comenzó a desempeñar su rol docente, en la Escuela Nacional Nº 198, hoy Escuela “José Giménez Lagos”. Más tarde, Lilia sería maestra, además de Vice Directora y Directora. Desde su ingreso a la misma integró la Cooperadora Escolar, en carácter de Secretaria, primero, y de Asesora, después Realizó un sinnúmero de obras en el seno de su querida escuela, en las que quedó impreso su sello personal con el aporte de su creatividad, espíritu de renovación, fuerza de voluntad, y carisma para el liderazgo.
Lilia totalizó 21 años de servicios en la Institución, retirándose con motivo de su jubilación en diciembre de 1994.
Inmediatamente después de jubilarse, en 1995, participa de la decisión de crear un Centro Educativo de Nivel Superior No Universitario, con la carrera a término de la Tecnicatura Superior en Administración de Empresas, dependiente del Instituto Superior del Profesorado en Ciencias Económicas y Ciencias Jurídicas “Dr. José Antonio Ortiz y Herrera”, de la Ciudad de Córdoba.
Al al finalizar el trayecto de esta Tecnicatura, comienza las gestiones junto a miembros del Directorio de Arcor, entre ellos el Lic. Hugo Enrique Lafaye, para la continuidad de los estudios superiores en Arroyito que, a partir de 1998, se concreta con la Extensión Áulica Arroyito de la Universidad Tecnológica Nacional, Facultad Regional San Francisco. Desde los comienzos de este Centro de Altos Estudios, la Sra. Nené se desempeña en roles administrativos y de Extensión Universitaria.
Participó de la Comisión Directiva del Centro de Jubilados y Pensionados “Fulvio Salvador Pagani”.
Presidió, junto a Miguel Fontana, la Comisión para la Celebración del Bicentenario de la Revolución de Mayo, durante los años 2009 y 2010.
Participó como miembro del Jurado en diversas ediciones del Concurso Literario Anual “Premio Concejo Deliberante” de la Municipalidad de la Ciudad de Arroyito. De igual modo, en otros concursos de carácter educativo y/o cultural.
Nilde Raquel Alonso (Chichy) nace en su amado Arroyito el día 14 de Julio de 1932. Hija de: Natalina Mastri Bianchi y Carlos Alonso García; una hermana: Berta Beatriz Alonso de Ceccón.
Contrae matrimonio con Armando Enrique Mazzoni, con quien tuvo dos hijos: Carlos Enrique y María Mónica.
Estudió Profesorado de Mecanografía en la escuela de las Hermanas Mercedarias, obteniendo dicho título en la “Academia Remington” de la ciudad de Santa Fe, dándole autoridad para dar clases y tomar exámenes en esta ciudad, en la localidad de El Tío y San Francisco del Chañar.
Trabajó Ad Honoren en la década de 1.950 en la Escuela Manuel Belgrano como profesora de mecanografía, fue designada como profesora de su especialidad en la escuela Dr. Dalmacio Vélez Sársfield – Nivel Medio desde el año 1957 al año 1990.
Fue integrante del Consejo Directivo la escuela Dr. Dalmacio Vélez Sársfield durante varios años, cursó estudios de “Declamación” con profesores de la Escuela García Fort de la Ciudad de Córdoba, asistió a clases de teatro en “Radio Nacional” con el profesor Carlos Carranza, participando en una obra de teatro.
Fue integrante en varias oportunidades del Teatro Vocacional dirigida por el Padre Roberts, actuó por última vez en el año 1994 en la obra dirigida por la profesora Betty Guarch en el salón del Colegio de las Hermanas Mercedarias.
Integrante de la comisión de “LALCEC” en sus comienzos, fiel colaboradora del “Museo Municipal” con el recordado Eloy Fernández.
Destacada por la Municipalidad de Arroyito como mujer del año en Marzo de 2009.
La trayectoria y constante participación social de Nilde Raquel Alonso de Mazzoni (Chichy) justifica ampliamente la decisión de otorgarle el presente homenaje.
Ana María Medina nació el 04 de agosto de 1939 en esta ciudad de Arroyito, hija de Ana Irma Baudan Milani, oriunda de La Plata y de Don Eugenio Medina nativo de Arroyito.
Cursó estudios primarios en la escuela de las Hermanas Mercedarias Santa María de Cervellón y sus estudios secundarios en la escuela Vélez Sársfield, de la cual formó parte de la Primera Promoción de egresados de la misma.
A pesar de lo difícil que era estudiar en esos tiempos, se capacitó en pedicuría y cursos como el de maquilladora profesional, artística y de novias. En su vida laboral trabajó: 5 años en Farmacia Ballatore, 20 años en Administración Arcor y 5 años como Secretaria de Clínica Mayo.
En la comunidad desarrolló una gran cantidad de actividades y todas sin remuneraciones, como por ejemplo: – programa para la Mujer en Radio Arroyito – Programa junto a Leda De Elías la en Radio Argentina y colaboradora en la revista Utopía, también en temas de la mujer – Además integró una gran cantidad de comisiones y subcomisiones en nuestra comunidad.
Colaboró con el Centro Vecinal Nicolás Batalla, Hospital Municipal, Subcomisión de mujeres del Club Deportivo y Cultural Arroyito, Vicepresidente de la Cooperadora Policial (primera mujer). También fue integrante de la comisión fundadora del Ballet Municipal, de la Academia Flor de Ceibo y del Centro Tradicionalista Atahualpa Yupanqui. Integró el Teatro Vocacional de nuestra ciudad y representó a Mirtha Legrand en una de las obras, además de ser la maquilladora del mismo en varias ocasiones.
Junto a Roberto Bazzi integró el ciclo “Un Boliche como los de antes” que durante diez años.
La Pochi, como le decimos todos, vivió junto a sus padres hasta el último día de vida de cada uno de ellos, de los cuales, valora sus concejos, recuerdos y enseñanzas de persona de bien, y el haber heredado de su papá Eugenio la vocación por la política.
El año 1995 la primera candidata mujer a la intendencia de la ciudad. A pesar que no logró ser Intendente, continuó desarrollando su vida con los mismos valores y vocación de persona honesta y humilde como lo fue siempre.
Posteriomente se les entregó a cada una de ellas, las respectivas Declaraciones y Plaquetas recordatorias.
