Con el domingo de Ramos se inicia la Semana Mayor, últimos días de Jesucristo, que finaliza el Domingo de Resurrección o Pascua de Resurrección.
La Semana Santa o Semana Mayor está cargada del sentido cristiano y según estos debe ser tiempo para reflexionar en Jesucristo, hijo de Dios que ofrendó su vida para que vivamos en paz.
El significado de esta semana es puramente cristiano, sin embargo, este período de asueto es empleado por muchas personas para realizar actividades de esparcimiento y diversión.
Este “tiempo santo” muy bien podría ser utilizado para reflexionar en qué cosas podemos hacer para realizar cambios positivos en nuestras vidas, trabajo, en el país y por qué no hasta en el mundo.
Para los cristianos, la Semana Santa es el tiempo litúrgico más importante, y es dedicado a la oración y reflexión de los misterios de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, hijo de Dios.
La época se inicia con la cuaresma, conocida como el tiempo de preparación, donde se recuerda los cuarenta días de Jesús en el desierto. Comienza con el miércoles de ceniza y culmina con el Domingo de Ramos.
Es bueno aclarar que todos los actos que se realizan desde el inicio de la Semana Santa, tienen un significado cristiano, y con ello se busca recordar el sacrificio de Jesús en la cruz.
El verdadero significado de la gran Fiesta Pascual, como también se le llama a este período, es tener un encuentro con Dios y acercarnos más al prójimo realizando buenas acciones.
Los cristianos interpretan la Semana Santa, no como el recuerdo de un hecho histórico, o un momento de vacaciones sin sentido, para ellos es tiempo de perdón y de reconciliación fraterna, expulsando de sus corazones el rencor, odio y la envidia.
La Semana Mayor se inicia este primero de abril con el Domingo de Ramos, día en que se recuerda la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén y finaliza el domingo 8 del mismo mes, con el Domingo de Resurrección.
Por su lado, el Jueves Santo abre el Triduo Pascual, que no es más que los tres días en que los católicos celebran la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Comprende el tiempo desde la tarde del Jueves Santo, hasta la tarde del Domingo de Pascua. Es el corazón del año litúrgico.
El Viernes Santo es el episodio más triste de la Semana Santa conmemorándose la muerte en la cruz de nuestro señor Jesucristo.
El Sábado Santo se medita sobre el misterio de la pasión de Cristo, el Domingo de Resurrección, es el momento de mayor júbilo donde se celebra la resurrección de Jesús.