En Julio de 1995 la Asamblea General de la ONU (Naciones Unidas) proclamó el Día Internacional de las Cooperativas, a conmemorarse el primer sábado de julio de todos los años.
En esta fecha se conmemora el aniversario (nacida en 1895) de la Alianza Cooperativa Internacional, que es una asociación colectiva de organizaciones con 760 millones de miembros de cooperativas en 100 países. Es un reconocimiento de que las cooperativas se están convirtiendo en un factor indispensable del desarrollo económico y social.
Sin dudas que es un modelo a seguir, ya que el principio esencial de esta práctica es el ejercicio de la democracia. En una cooperativa cada socio tiene un voto igualitario dentro de la organización, cualquiera sea el número de acciones cooperativas que posea; los asuntos de deciden en conjunto y eligen libremente entre ellos a quienes dirijan la entidad.
Una cooperativa es un medio de colaboración mutua, una asociación voluntaria de personas y no de capitales, con personería jurídica y responsabilidad limitada, cuyo objetivo principal es el servicio hacia el socio y no el lucro, aunque propende a la generación de beneficios para todos. Un ejemplo histórico es el de las cooperativas agrarias.
El día internacional del cooperativismo es el día de la hermandad, de la igualdad y de la equidad. El cooperativismo es una ideología, una forma de vida, no una manera de obtener ganancias especulativamente (esta es la diferencia fundamental con otro tipo de sociedades). El día internacional del cooperativismo es también el día de sus principios regentes: la adhesión voluntaria y abierta, gestión democrática, participación económica de los socios, autonomía, independencia, educación, formación, información, cooperación intercooperativas e interés por la comunidad en general.
Estos ideales de paz y unidad se plasman en su bandera color arco iris en bandas horizontales que simbolizan su carácter de universalidad y pluralismo. El rojo relativo al amor entre las personas y el fuego vital; el naranja de un amanecer; amarillo por el sol y el calor que también brinda el cooperativismo a las personas; el verde de la esperanza; el azul celeste es la ilusión, pieza elemental del cooperativismo que con cada nueva empresa la lleva inserta; el azul marino es la representación del valor de los cooperativistas; el violeta simboliza la humildad.
Lo mismo sucede con el emblema: el árbol de pino símbolo de vida, de inmortalidad y de fecundidad traducidos en perennidad, perseverancia y solidaridad, norte del cooperativismo. Los dos pinos unidos representan la hermandad dentro de un círculo de eternidad. El día internacional del cooperativismo es el día de la lucha contra la pobreza dado que estas entidades son una herramienta fundamental contra ella.
Las cooperativas vienen promoviendo desde hace tiempo enfoques integradores y sostenibles con respecto al desarrollo económico y social a nivel local. Y en consonancia con esos enfoques, están ampliando sus actividades de desarrollo de manera creativa, en esferas sustentables.