SOCIEDAD. Hoy martes, 3 de noviembre se cumplen 25 de años de las explosiones de Río Tercero de 1995. Ese día estalló la Fábrica Militar de Armamentos que se encontraba en esa localidad cordobesa, destruyendo el establecimiento y parte de la ciudad, causando la muerte de siete personas, hiriendo a más de trescientas y dañando seriamente la salud mental de la mayor parte de la población de la ciudad.
En 2014 el Tribunal Oral Federal de Córdoba N° 2 dictó la sentencia sobre el caso, condenando a cuatro altos funcionarios de la empresa estatal Fabricaciones Militares, todos ellos ingenieros y militares retirados, a penas de trece y diez años de prisión, por el delito de estrago doloso (intencional) agravado por la muerte de personas. El tribunal concluyó también por unanimidad y con plena certeza que el móvil de la explosión fue el encubrimiento del contrabando de armas a Ecuador y Croacia realizado entre 1991 y 1995.
Todavía continúan las causas judiciales por lo sucedido hace ya un cuarto de siglo, familiares de víctimas reclaman al Poder Ejecutivo porque aún no cobraron sus indemnizaciones. Ana Gritti, esposa del fallecido Hoder Dalmasso, se puso al hombro la causa y se hizo experta en explosivos: así supo que el trotyl no se enciende con el fuego y no explota sin un detonador. Ella ya falleció, pero se viene un nuevo juicio cuyo único imputado es el expresidente riojano.